Se dice que la Navidad es una época de excesos, y así lo es, aunque sea para una parte pequeña de las personas que vivimos en este planeta: exceso de comidas, exceso de cenas, exceso de beber, exceso de fiesta y juerga… Pero también hay otro tipo de excesos: Exceso de anuncios de colonia machistas. Exceso de lucecitas navideñas en las calles. Exceso de horas dando vueltas en el centro comercial. Exceso de langostinos en nochevieja. Exceso de trabajo para la ama y la abuela en la cocina para que otros cenemos tranquilamente. Exceso de compras absurdas. Exceso de juguetes y catálogos con muñecas y cocinitas para las niñas y coches y pistolas para los niños. Exceso de Santa Clauses bebiendo Coca Cola. Exceso de estrés consumista. Exceso de cajas y plásticos amontonados junto a los contenedores. Exceso de viajes y desplazamientos en coche…